sábado, 25 de abril de 2009

Reviviendo la última XP Swinger

Hace un par de dias, charlando con mi mujer después de hacer el amor nos pusimos a rememorar nuestra última experiencia swinger y salieron a la memoria algunos hechos de color como para recordar.

Apenas llegamos tuvimos que hacer cola para pagar la entrada al boliche, se habrían juntado unas 5 o 6 parejas en el lobby de entrada. Detrás nuestro llegan 2 parejas que habían ido juntas y uno de los hombres empezó a saludar a medio mundo, lo que podríamos llamar un abitué. De repente se dá vuelta el señor que tenemos delante, que estaba con su pareja, y dice -"Hola, que tal. Esteee, venimos a una despedida de soltero, si, tenemos una despedida de soltero", tratando de proteger lo que pueda pensarse de su mujer, mas de lo que se piense de él. Lo dijo con tan poca convicción que se notó a la legua que estaba mintiendo. -"Ah, bueno, que se diviertan." respondió el abitué sabiendo que no es nada comodo, para los que van por primera vez o cada tanto, encontrarse a alguien del "mundo exterior". La mujer de este pobre hombre, que seguramente había sido convencida por su marido después de meses y meses de hablarle, le puso cara de te mato y vayamonos ya mismo de acá. Aprovechando una puerta lateral que da al bar/restaurant que hay pegado al boliche, escaparon en forma mas o menos disimulada a su entender.
La moraleja de esto es que tengan bien pensado lo que van a decir si se encuentran con algún conocido (que espero que no sea la hija, hijo, padre o madre!).
Creo que la más simple es decir... -"Venimos por primera vez a ver de que se trata". Si, claro en las anteriores uno participó como loco, pero con conocidos a la vista, "solo venimos a ver de que se trata". De última la otra pareja está en la misma, salvo que el conocido haya ido solo o con un gato. Si esta persona no está casada, eso deja a la pareja en leve desventaja. De todas formas es mucho mas honorable ir a un boliche swinger con tu pareja que tener que ir solo, o pagandole a una chica para que te acompañe.

La otra nota de color fué la aparición de un conocido periodista de televisión argentina. Siempre tuve la duda como hacian... si tendrían su propios boliches o se enfiestarian directamente en las casas. Parece que no... los pobres diablos tienen que exponerse mucho mas que uno que no es conocido publicamente. Obviamente no pienso decir cual es su nombre, ya que admiro la valentía (o calentura) que hay que tener para ir a un boliche de este tipo siendo alguien conocido.

Finalmente, lo mejor de la noche se limitó a poder observar a una pareja de un poco menos de 30 años, ella morocha de 1,65 aprox, flaquita, muy linda de cara, nada exuberante, pero vestida sensualmente para la ocasión, haciendo el amor con su pareja, un flaco alto con bastante pinta. Los gemidos de esta chica eran un placer escucharlos.
No fué mucho, pero es el recuerdo más agradable que nos quedó de esa noche. La próxima intentaremos un día menos concurrido e iremos con menos expectativas.

1 comentario:

  1. Me divertio lo que contas. Yo tengo algunas experiencias en el mundo swinger. Algunas divertidas, otras muy sensuales, otras casi dramaticas.
    Lagarto.
    www.noesmedionifin.blogspot.com

    ResponderEliminar